domingo, 3 de mayo de 2015

EDUCADOS Y/O PROGRAMADOS LA VOZ INTERIOR, NO SOLO ES EL YO, SINO EN PARTE, LA VOZ SOCIAL

EDUCADOS Y/O PROGRAMADOS 
LA VOZ INTERIOR, NO SOLO ES EL YO, SINO EN PARTE, LA VOZ SOCIAL

A lo largo de nuestra vida, hemos sido educados en base al pensamiento de otras personas (pensadores, científicos, políticos, publicistas, padres, madres, profesores, etc). Para forjar lo que pensamos y parece ser lo correcto o lo esperado.

Entre tanta información, muchos logran discernir de acuerdo a sus creencias (basado en esos pensamientos de otros), para formar sus propias construcciones mentales.  Otros en cambio, van como el oleaje, a merced de la masa de agua y esta a su vez, a merced de la fuerza de la naturaleza, en escalas de poder también. 

Aunque intentemos discernir y formar nuestras propias ideas, de todas maneras es inevitable pensar de forma independiente totalmente, pues tomamos las construcciones mentales generales, dadas por otros individuos, tomando de aquí y de allá... 

Quienes pertenecen a una ideología, religión, secta, partido, o cualquier otro grupo, entonces tomarán las ideas impartidas por otro individuo(s).

De esto se desprende que, si aceptamos los objetivos sociales de éxito, estamos aceptando lo que para otros ha significado éxito.  Por lo tanto, dado que podemos pensar como seres independientes, así sea de forma parcial, tenemos la capacidad de dar un significado diferente al que nos han impuesto.  Otra cosa, es que aceptemos ese objetivo, pero recordemos que tal vez estemos aceptando la visión del mundo de otro, o de otros.

Otro ejemplo: Si pensamos en el tiempo, ese instrumento que usamos y compartimos todos, como forma de organizar nuestros eventos e historia,  ha sido creado como concepto por otros seres humanos, y los demás a partir de esa construcción, comenzamos a aceptarlo como tal y para lo mismo, por ello el tiempo significa lo mismo o casi lo mismo para todos. Sin embargo nadie sabe realmente en que momento del tiempo  estamos, podríamos pensar colectivamente  que estamos en 1900 o en el 2100, si compartiéramos alguna nueva forma de medirlo y por consenso lo aplicáramos. Pero de hecho otras culturas tienen una fecha calendario distinta. O según la latitud, en este momento, es una hora u otra, como si estuvieran en el pasado o futuro, en relación a nosotros. 

Otro ejemplo: Resignificamos palabras cuando vivimos en otro país, porque nos adaptamos  a nuevos significados para algunas palabras que conocemos, tal como "pena" en Colombia, denota vergüenza, en España: compasión o pesar. Así mismo hay múltiples palabras que suenan igual pero tienen significados diferentes incluso en el mismo país, pero en diferente región.  Es así, como evidenciamos que aceptamos casi sin pensar, esa amplia posibilidad de resignificar esos conceptos, tan fácil como aceptamos el cambio de tiempo al viajar de un país a otro. 

Pero, ¿a mi para que me sirve esta reflexión, si la masa no cambiará ese significado? Pues para que en mi mundo mental, las cosas no me afecten de forma tan negativa, ya que si comprendo que esos conceptos fueron dados por otros individuos, personas como tu y como yo, por lo tanto podríamos emitir una nueva opinión o significado para mi conveniencia. Claro que  sin olvidar el significado colectivo, para no ser antisocial, ni dejar de entenderme con los demás. Sin embargo podría hacer una disociación en mi pensamiento, como cuando los móviles tienen aplicaciones abiertas en  segundo plano. En nuestro caso, si fuéramos un móvil: tendría una aplicación que escucharía esas palabras con su significado social compartido, con la que entiendo el mundo. A la misma vez, otra aplicación abierta en segundo plano, la cual se encargaría de resignificar las palabras y/o situaciones, actuando como filtro y reconduciendo o reprendiendo la voz interior que habla, teniendo muy en cuenta que parte de esa voz interior son las creencias y lo que otros nos han implantado como ideas, a lo cual le llamo "LA VOZ SOCIAL". Nuestro ser mas libre, se siente apabullado por tantas limitaciones, e impide que nuestra naturaleza fluya. Así que ese monstruo en el que se convierte la voz, en realidad son las religiones, culturas, creeencias de otros, etc . Por ello muchas veces se escucha como opresor. Cuando identificamos que aquella voz, no solamente es el yo, comienzo a ser mas libre, aunque tengo en cuenta lo que dice como ser social, pero entendiendo que aunque me acompañará, ya la podré entender y no le permitiré tener todo el control.   

Andrés Corral

No hay comentarios:

Publicar un comentario